autismo

El término "Trastornos del Espectro del Autismo" (TEA) subraya dos aspectos: el primero, que nos estamos refiriendo a una condición de origen neurobiológico que afecta al desarrollo de la persona y la acompaña a lo largo de toda su vida y, el segundo, que existe una heterogeneidad considerable en la manifestación del TEA, que abarca desde el cuadro completo a una expresión parcial o rasgos individuales, que tienen relación con el TEA, pero que no justifican un diagnóstico.

Su expresión varía enormemente, no solo entre diferentes personas, sino también en la misma persona a lo largo del tiempo. Algunos aspectos pueden ser más marcados e intensos a cierta edad, y fluctuar en naturaleza y gravedad a otra, generando perfiles muy diversos que, no obstante, son expresiones del mismo espectro.

A pesar de esta diversidad individual, hoy en día están evidenciadas las dos áreas centrales del funcionamiento personal en las que impacta:

1. COMUNICACIÓN E INTERACCIÓN SOCIAL

  • Presentan dificultades en la comunicación (aunque no necesariamente en el lenguaje), que pueden afectar a la interpretación de los mensajes o a la expresión de sus estados.
  • En ocasiones, manifiestan formas diferentes de expresarse a nivel no verbal, que pueden ser malentendidas por el resto de las personas que intervienen en el contexto.
  • Algunas no comprenden las claves conductuales de la interacción social por lo que, en ocasiones, les cuesta saber cómo reaccionar, ajustar su comportamiento, expresarse a nivel emocional o comprender las reglas sociales que se desarrollan de forma diferente según el contexto en el que se esté participando.

2. FLEXIBILIDAD DE PENSAMIENTO Y COMPORTAMIENTO

  • A muchas les cuesta un gran esfuerzo adaptarse a los cambios y situaciones imprevistas. Tienden a necesitar que las cosas siempre ocurran de la misma manera, y a responder de forma similar y repetitiva a las diferentes situaciones. Generalmente, tienen intereses muy claros y restringidos en los que se enfocan, siendo difícil mostrar interés por otras actividades.
  • A menudo, perciben los estímulos sensoriales de forma diferente, lo que incide en la forma en la que participan en el entorno cuando se presentan estos estímulos. Por ejemplo: fascinación por las luces u objetos brillantes, malestar ante determinadas texturas alimenticias o táctiles, aparente indiferencia ante la temperatura del lugar o un umbral del dolor desajustado.

ALGUNAS IDEAS PARA LA PRESTACIÓN DE APOYOS

  • CONOCER

    Debemos tener una idea clara de las características del autismo y analizar cómo se manifiestan en cada persona, a la que hay que conocer bien para poder dar respuesta a sus necesidades.

  • IDENTIFICAR

    Debemos saber identificar la etiología nuclear, definida por patrones conductuales que se manifiestan de forma muy diferente, revisando manuales y bibliografía actualzada.

  • ADAPTAR

    Debemos ser flexíbles y adaptarnos a las necesidades cambiantes. Las características, gustos e intereses pueden variar a lo largo del tiempo, igual que nos ocurre a todas las personas.